Una vista a una familia Cristiana

En verdad no ha sido necesario el uso de mis facultades intelectuales (reales o ficticias), para que yo me haya convencido que Dios está guiándome a ciertas conclusiones y haciendo que yo reformule mis metas.
Un día de la semana pasada recibí una inesperada invitación de una persona que es my friend a cenar en una casa cristiana. Para ponerlos en situación, la ocasión fue el Dia de Acción de Gracias o Thanksgiving day. No conozco los detalles históricos de la celebración salvo que es un momento en el que los inmigrantes Ingleses unidos como familias le agradecieron a Dios el haber salvado sus vidas tras un año de esfuerzos y sacrificios en el nuevo mundo, el cual con el tiempo ha llegado a conocerse como EEUU.
Esta celebración ha llegado a ser un momento en el que las familias se reúnen en una cena para celebrar en unidad o si son cristianas o religiosas, para dar gracias a Dios por estar vivos, sanos y por tener una familia.
Entenderán que el asunto es una ocasión intima. Tú no invitas a cualquiera a disfrutar del calor de tu familia o a compartir una comida como un igual en tu mesa.
Reconozco que me sentí muy honrado por la invitación, y sin reflexionar dije que Sí inmediatamente.
Digo que lo hice sin pensar, motivado más bien por el deseo de quemar algo de mi tiempo en casa, después de todo me dije…no tengo nada que hacer, salvo leer El conde de Montecristo (se recomienda).
Hago esta mención para dejar claro que si yo hubiera pensado mejor, si lo hubiera pensado dos veces, en verdad no hubiera ido.
Yo soy un tipo tímido, hablo inglés a un 60-75% de entendimiento, vengo de un país al que el promedio de los Americanos suponen que está en algún lugar al Sur de Texas y es fácil envolverse en conversaciones del tipo “Y ustedes aún cazan venados para alimentarse”? es una exageración pero ustedes saben a donde voy,
Y además… vamos…no me gusta molestar a los demás.
Le dije a mi friend el día de la cena (my friend una persona made in USA), que después de pensarlo bien, por un momento pensé que no era apropiado ir, sin embargo a pesar de mi incomodidad, me dejé llevar.
Ejercí fe, y asumí que Dios quería decirme algo.
Por favor tengan en cuenta este último punto pues concluiré con esto mismo.
Muy lejos de mi casa, después de manejar por congestionadas calles bajo una persistente lluvia, tras viajar por senderos cubiertos de árboles entre caminos ondulados por las suaves pendientes de los cerros llegué a la casa.
Cuando mi partner me hizo la seña (pues yo manejaba mi auto) para detenerme, nos detuvimos en una hermosa residencia de jardines bien cuidados, de cortes angulares con un estilo entre Frank Lloyd Wright y Le Corbusier…(eso para decirles que era una bellísima casa).
Esta es la casa?! le dije asombrado.
Y en ese momento, entré en pánico social.
Qué iba a hacer?…ya estaba allí.
Imaginé que el dueño de casa me recibiría con un flemático acento Inglés con una pipa de tabaco portugués y una corbata de seda para decirme…”What is the matta?”.
Miré mi ropa y agradecí el haber al menos ese día planchado mi camisa.
La sonrisa amable de mi acompañante a quien le importaba menos que nada el asunto, me calmó.
Mi friend entró saludó a todos. Yo tragué saliva, cerré los ojos y entré.
Amablemente la familia se presentó y yo me quedé ahí parado en el umbral por una fracción de segundo pensando más en mí que en ellos.
Mis aprensiones terminaron de inmediato.
Estaba en un hogar cristiano.
Cómo es un hogar cristiano?
Es un hogar donde reina el amor.
En otras circunstancias hubiera descrito con detalle el ambiente físico que me rodeaba, sin embargo el tema acá era otra cosa. Lo valioso de esta casa no estaba en sus decoraciones ni en su arquitectura. De mucho más valor que todo lo material que esta casa tenía, eran las personas que estaban allí reunidas. Es como el valor de la Iglesía dado por las personas que están allí más que por la riqueza del edificio.
Por mi parte pude experimentar por un instante lo que una familia cristiana hace.
El Padre de familia un señor amable y “dulce”, me recibió con toda la amabilidad posible. La mamá de la casa, una señora dulce, simpática y de ojos muy inteligentes. (Ella es una artista plástica, cuyas obras están distribuidas por todo el lugar dando un ambiente de hogar “home”, que invita a la calma y a la paz), siempre fue tan cortés conmigo que me sentí acogido inmediatamente.
Sus hijas, ya todas ellas mayores, cristianas, dulces, amables, sonrientes y bien educadas.
Hubo otros invitados también, como una tía que era muy simpática y extrovertida.
Les diré en qué cosas me fijé.
Lo primero en que puse mi atención de modo instantáneo fue el modo en el que los esposos se trataban entre ellos. El papá no era un Pater Familias ejerciendo su autoridad como un rey en un trono. La primera imagen que recuerdo de él es trabajando en la cocina. Su tono de voz calmado me transmitio la imagen de un hombre sabio y extremadamente culto (impresiones sólo por comentarios acerca de palabras en Inglés y su explicación de el origen Azteca de la palabra Chapultepec). Sus hijas lo trataban con respeto, pero con amor, un hombre más bien amado que temido. Tu piensas…cómo este hombre pudo haber hecho una familia como esta?…y la respuesta inmediata es, la mamá.
La señora tenía un carácter extrovertido, amable y enérgico. Una ejecutiva en la sociedad, digamos que era el CEO o Gerente General de la Compañía. Me pareció un mujer práctica y llena de amor. También una frase que me dijo me hizo percibir que era una persona con alta tendencia racional. Al mencionar acerca de la importancia de María, puso énfasis en que el conducto para Dios era “Jesús”, “María es importante, pero no es Jesús el camino”?…Y agregó cortésmente…”sin ánimos de ofender” jajaja. (Supongo que si eres hispano la probabilidad de ser Católico es relativamente alta)
En las miradas entre estos dos esposos no había frío, no se sentía hastío, no estaba presente el paso de los años. Al verlos tú podías percibir el amor genuino que basado en los principios de Cristo los hacía ser uno solo. En un momento en la mesa, la mamá le hizo una caricia tierna en la mejilla al papá, y me partió el corazón. Esa era la verdadera riqueza de esta casa, no sus muebles, ni pinturas en los muros.
Cuando ves a una pareja cristiana así, no es sorpresa que los hijos sean el fruto de la armonía y el amor. Las hijas de esta matrimonio no son chicas top, cuya máxima en la vida es el materialismo consumista. Son cristianas. Ellas habitualmente visitan países más pobres para ayudar en misiones. Así gastan el tiempo ellas. Eso habla solamente bien de los padres.
Que familia tan bendita de Dios.
Mis reflexiones al ver esta familia No son las inmediatas…y obvias a muchos.
Sí eres un buen cristiano…tendrás un BMW a la puerta de tu casa.
Tendrás una buena esposa que te ame por siempre.
Tendrás hijos cristianos y virtuosos.

No, esa no es la conclusión…

Lo que yo extraigo es que una familia de este tipo es construida con esfuerzo constante.
Imagino los años adolescentes y los dolores y sufrimientos de la familia al ver a sus hijas creciendo y siendo presa de las variaciones hormonales. Imagino las lagrimas al estar dedicados a imponer un modelo cristiano en un mundo en donde los antiguos valores parecieran estar en franca retirada. Yo creo que esta familia creció al alero de lectura y aprendizaje de principios bíblicos y no bajo la omnipresencia de la televisión.
La razón por la que yo creo esto es.
Aunque no tengo dudas que ingreso anual de esta familia es mayor que el promedio en EEUU, ellos no tenían un despliegue irracional de una Superhypermagnaultra Plasma TV, común en la mayoría de las casas americanas, sino una TV común.
Algo relacionado con esto es, que el pasatiempo después de la cena fue que una de las hijas, se sentó a leer un texto costumbrista. Su capacidad de lectura era excelente. La hija era capaz de leer con sentido, dando el tono y las correctas inflexiones de voz. Cambiando la cadencia de sonidos al referirse a un personaje o al autor, en verdad un relato que te mantenía atento y que era un texto cómico que hizo a todos pasar un buen momento con los divertidos pasajes del protagonista. Ví a todos reir y estar juntos disfrutando en familia alrededor de UNA LECTURA!!!!! O sea….me van a decir que eso no es extraordinario?????
No es de extrañar que las hijas sean todas profesionales. Pero contrario a lo que pudieras creer, todos humildes como la espiga inclinada que esta llena de grano.
Mi conclusión me llevó a otra cosa.
La familia es en verdad el núcleo de la sociedad cristiana.
Por eso entiendo ahora mejor el valor de las recomendaciones cristianas respecto a la familia. Y otra reflexión más.

Cuando uno examina la vida de Jesús. Cuando uno percibe la formación que él tuvo y ves el modo en el que Jesús se dirigía a las personas de toda clase, te maravilla el despliegue de ternura, amor y sabiduría que el mostraba.
Sorprende menos y es casi predecible el hecho de que Jesús venía de una familia que estaba en el cielo, una familia perfecta.
Creo que ayer aprendí que la riqueza, no está en las posesiones materiales, sino en cómo tu vida es influida por el amor de Jesús.

3 thoughts on “Una vista a una familia Cristiana”

  1. ME DIO MUCHO GUSTO QUE HAYAS HECHO ESO,IR A ESA CENA FUE LO MEJOR QUE TE PUDO HABER PASADO UN 26 DE NOVIEMBRE.

    JUANITA

  2. Querido Miker…. así mismo es. Ahora seguro que también orarás por ellos… y no cesarás de dar gracias. Así es el aprendizaje. Aprendemos con el ejemplo.

    🙂

    Besos.

    Aloha.

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